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Esta flagrante ilegalidad fue posible porque el acto administrativo de la alcaldesa no se sometió al control de legalidad de la Contraloría llamado “Toma de Razón”.
La Presidenta Bachelet conformó un Consejo Asesor para atacar la corrupción, los tráficos de influencias y otras lacras que se observan en el sistema. Los 16 integrantes de dicho consejo, a fines de abril próximo, le entregarán a ella sus propuestas, esperando que más adelante tanto el sector privado como la función pública empiecen a ceñirse a las normas legales y reglamentarias establecidas.
Ahora bien, en la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUC) se dice que sobre los pasajes solo se pueden construir edificaciones habitacionales de hasta 3 pisos y para burlar tan clara disposición, la Municipalidad de Viña del Mar modificó su Plan Regulador Comunal fijándose que todas las vías públicas existentes de esa comuna con tránsito vehicular que tengan un ancho entre líneas oficiales de menos de 12 metros y hasta 8 metros o aquellas cuya calzada no sea inferior a 6 metros, serán clasificadas como vías locales.
Con este ocurrente cambio en las reglas del juego, sobre un pasaje sin salida que tiene 10 metros de ancho entre líneas oficiales, localizado en el sector Santa Inés, la Dirección de Obras autorizó en septiembre de 2014 la construcción de un edificio habitacional de 20 pisos, es decir, vulnerándose abiertamente los artículos 2.3.1 y siguientes de la OGUC, instrumento éste de alcance nacional que tiene mayor jerarquía que los decretos alcaldicios que originan los PRC.
Esta flagrante ilegalidad fue posible porque el acto administrativo de la alcaldesa Reginatto no se sometió al control de legalidad llamado “Toma de Razón” por parte de la sede regional de la Contraloría General de la República.
Esta omisión fue posible solo porque las modificaciones a los PRC de ciudades que están insertas en un Plan Regulador Intercomunal (PRI), como sucede en la especie, no tienen la obligación de ser visadas por el ente fiscalizador. En la V Región de Valparaíso existe un PRI que se denomina PREMVAL y por ello será necesario denunciar el ardid relatado en la propia Contraloría Regional.