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El precio de mercado de los terrenos, cuando se cursen los cambios en las reglas del juego, se elevarán en casi 3 veces el importe recibido por Caval.
En nuestra última columna “El lucrativo cambio de uso de suelo” aludíamos al caso Caval y le recordábamos al Gobierno sobre la existencia de un antiguo proyecto de ley referido a la captura parcial, por parte del Estado, de las enormes plusvalías que obtienen los privados con las decisiones administrativas sobre este tipo de cambios urbanísticos adoptadas por el Minvu y los gobiernos regionales.
Está claro que en el episodio de las 44 hectáreas rurales localizadas en Machalí, los dueños de las mismas, socios de una empresa agrícola en dificultades financieras, dejaron de obtener la ganancia de $3 mil millones, la misma que se embolsó Caval gracias a sus oportunos contactos con aquellos que se desenvuelven en el mercado de las compraventas de este tipo de predios.
Todos sabemos que el actor inmobiliario de Rancagua que le compró en $9 mil quinientos millones esas 44 hectáreas rurales a Caval, obtendrá una pingüe plusvalía cuando el gobierno regional de la 6ª Región las transforme en urbanas y al respecto lamentamos que nuestra débil institucionalidad todavía no asuma su rol para que estas materias de tipo especulativo estén regidas por ley.
Recordemos que ya una empresa mexicana deseaba adquirir estos predios, siempre y cuando fueran urbanos, y para tal propósito estaba dispuesta a pagar $27 mil millones, es decir, el precio de mercado cuando se cursen los cambios en las reglas del juego se elevarán en casi 3 veces el importe recibido por Caval.
En todo caso, no nos ha llamado la atención que el ex Seremi de Vivienda de la 6ª Región en el gobierno de Piñera esté pidiendo públicamente que el actual en el cargo se inhiba de ejercer su función en la continuación del cambio normativo en el Plan Regulador Intercomunal y como este luctuoso episodio ya está siendo investigado por fiscales del Ministerio Público, recientemente y por escrito, le hemos solicitado a Paulina Saball, ministra de Vivienda y Urbanismo, superior directa del actual Seremi, que ordene el pronto congelamiento de la tramitación en curso, ello por prudencia en la práctica de sus atribuciones en la Administración del Estado.
Fuente: http://www.estrategia.cl/noticias/detalle/columnistas/109869/caval-lo-que-vendra#.VOtBu3yG_KM