Defendamos la ciudad

Columna de opinión de Patricio Herman de la Fundación Defendamos la Ciudad publicada en portal Cambio21 el 05 de marzo de 2011. La opinión pública está dividida en cuanto a qué se debe hacer en esa importante zona de la ciudad. El ministerio sectorial sólo ha vendido un paño y Cencosud, su comprador, está a la espera de las decisiones que se deberán adoptar. El aeropuerto Los Cerrillos funcionó muy bien durante muchos años hasta que fue clausurado por decisión del ex presidente Ricardo Lagos y su ministro de Vivienda y Urbanismo Jaime Ravinet. Esas autoridades sostenían que esta base aérea comercial, que operaba en un terreno de 254 hectáreas, estaba subutiliza y así fue como a través de una simple Declaración de Impacto Ambiental (DIA) calificada presta y favorablemente el 14 de abril de 2005 por la Corema de la época, se modificó el uso de suelo de ese territorio, perdiendo su denominación de infraestructura aeroportuaria en el Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS) vigente desde el año 1994, estableciéndose un uso habitacional (residencial mixto). La modificación en las reglas del juego se llamó MPRMS 80 y en su reemplazo se promocionaba el denominado Portal Bicentenario, mega proyecto inmobiliario que, por diversas razones, no se ha iniciado a pesar de que, con cuantiosos recursos públicos, se ha materializado en su interior un magnífico parque de 50 hectáreas, el cual inexplicablemente todavía no se abre a la ciudadanía. El presidente Sebastián Piñera, recién asumido en el cargo, le pidió a un destacado ingeniero civil que hiciera un estudio de la situación para resolver el impasse. Sabemos que el resultado de ese estudio está en poder del Ministerio de Vivienda y Urbanismo )Minvu), pero el primer mandatario no ha dicho nada al respecto. La opinión pública, a través de aquellos actores que emiten juicios, está dividida en cuanto a qué se debe hacer en esa importante zona de la ciudad. Muchos son partidarios de recuperar total o parcialmente el aeropuerto y otros tantos desean que ahí se construyan casas para la clase media y en un cierto porcentaje para los más vulnerables. El ministerio sectorial sólo ha vendido un paño y Cencosud, su comprador, está a la espera de las decisiones que se deberán adoptar. Ahora bien, en los útimos días la prensa ha estado informando acerca de una iniciativa privada que ha ingresado al MOP para proponer la recuperación del aeropuerto, con una pista un poco más corta que la anterior. La modalidad comercial es a través de una concesión por 25 años, respetándose naturalmente el área verde ya construida y a la fecha ese ministerio todavía no declara que es de interés público ese proyecto. En un medio de prensa leímos que Fernando Echeverría, intendente metropolitano e importante actor inmobiliario, decía que no se podía volver atrás, refiriéndose a la posibilidad de construir el aeropuerto, porque, entre otros motivos, había que hacer un cambio de uso de suelo en el PRMS para posibilitar los futuros vuelos de lo aviones. Para que los lectores de Cambio 21, y aprovechamos de felicitarlos por su hebdomadario en papel que sale el próximo miércoles, estén debidamente informados acerca de la regulación urbanística vigente para ese gravitante predio, señalamos que la modificación del uso de suelo en el PRMS aprobada por la institucionalidad ambiental y corroborada más adelante por el Consejo Regional (CORE) Metropolitano, carece de valor legal, ello por cuanto ese cambio ha sido anulado por sentencias de primera y segunda instancia de los tribunales ordinarios de justicia, aunque sabemos que a esta fecha existe un recurso de casación en el fondo mediante el cual la ex CONAMA, hoy Servicio de Evaluación Ambiental, intenta revertir esta anulación. No sabemos cuando se resolverá esta contienda en la Corte Suprema. Quien presentó las acciones judiciales es la Federación Aérea de Chile y si algún lector desea conocer más sobre este asunto, señalamos que en el libro "Hacer Ciudad" que salió al mercado en el año 2004 aparece el artículo "Operación Cerrillos: entre el relleno y el fragmento" escrito por el arquitecto, urbanista y académico Jonás Figueroa, quien entrega luces desde el punto de vista de su especialidad. Los tribunales, como ya lo dijimos, declararon nula la calificación ambiental favorable respecto del cambio de uso del suelo porque la modificación debió haber ingresado al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) a través de un completo "Estudio", el cual considera la necesaria participación ciudadana. Cabe destacar que la nulidad decretada por los tribunales a la calificación ambiental del Proyecto Portal Bicentenario se basó en múltiples vicios de forma y fondo a la Ley de Bases del Medio Ambiente, entre otros, la existencia de contaminación por plomo y otras substancias en los terrenos objeto de la modificación, situación que exigía para la autoridad impulsora del proyecto, no sólo de un "Estudio" sino el saneamiento efectivo de los terrenos a fin de dejarlos aptos para el uso habitacional propuesto y así evitar un peligro o riesgo de contaminación para la salud de las personas. Por otro lado, no podemos perder de vista que, a partir de la Ley Nº 20.417, del 26 de enero del 2010, los cambios en los planos reguladores, tanto intercomunales, como metropolitanos y comunales y sus modificaciones (el PRMS es uno de ellos) deben contar ahora con una Evaluación Ambiental Estratégica (EAE), método en boga en el mundo que, para este tipo de proyectos, reemplaza a las "Declaraciones" y los "Estudios". Quien elabora la EAE es el Minvu, servicio de la Administración que no se ha pronunciado, suponemos que por prudencia, sobre la posibilidad de recobrar esta estratégica base aérea que complementaría la creciente operación de su par Comodoro Arturo Merino Benítez en la comuna de Pudabuel. En resumen, mientras la Corte Suprema de Justicia no emita una sentencia definitiva, el amplio terreno del aeropuerto Los Cerrillos continúa siendo de uso exclusivo aeroportuario, en términos tales que si el ejecutivo -Sebastián Piñera- lo desea, puede decretar el funcionamiento del aeropuerto sin problemas de ninguna especie porque si así procediese, instruiría a los entes competentes para que se desistan de la apelación radicada en esa alta magistratura.