Defendamos la ciudad

Columna de opinión de Patricio Herman de la Fundación Defendamos la Ciudad, publicada en revista El Periodista el 25 de julio de 2008. El viernes 18 de Julio pasado en El Mercurio se publicó en forma destacada un aviso de la Municipalidad de Las Condes en donde informa a la comunidad una modificación al Plan Regulador Comunal en los usos de suelo y normas de edificación para un sector determinado y como el texto, por su sesgo técnico, estaba dirigido a los profesionales que se desempeñan en el ámbito del urbanismo, lo más seguro es que muy poca gente lo leyó y de los que se atrevieron a leerlo, pocos entendieron su trasfondo. Vamos por parte : 1) el aviso de marras dice que se reemplaza para el polígono A-B-C-D-E-A la actual zona de uso de suelo vivienda por la zona comercio y equipamientos. 2) Tal polígono está conformado por las calles Monseñor Álvaro del Portillo, La Plaza, Carlos Peña Otaegui y San Carlos de Apoquindo, llegando a la cota 965 msnm en la precordillera. 3) Se modifica el trazado de la calle la Plaza que enlazaba con la calle Carlos Peña Otaegui, llevándola al proyectado Pié Andino en la cota ya referida. Revisando el plano respectivo, verificamos que 1) el polígono A-B-C-D-E-A no limita con la calle San Carlos de Apoquindo, sino que con el amplio terreno que ocupa la destacada Universidad de Los Andes, el cual enfrenta por el oriente la calle La Plaza. 2) la actual calle Monseñor Álvaro del Portillo se llamaba hasta hace poco General Blanche y entendemos que la calle Carlos Peña Otaegui, conmemora a un insigne ascendiente del concejal de Las Condes y presidente de RN Carlos Larraín Peña. El alcalde dice que en el predio que cambió sus deslindes, por el nuevo trazado de la calle La Plaza, con lo cual aquel se podría ampliar por fusión con el terreno de la Universidad de Los Andes, los proyectos de equipamiento de escala mayor (altura máxima 5 pisos y 17,50 metros) de educación, cultura y salud, emplazados en terrenos de 5 o más hectáreas podrán ejecutarse aún cuando enfrenten vías de menor categoría. Recordemos que la modificada calle la Plaza es una vía colectora que no admite equipamientos de escala mayor, razón por la cual no sabemos cómo podrá tener vigencia esta norma de carácter local. Ahora bien, Monseñor Álvaro del Portillo, nombre que le asignó Las Condes a la continuación hacia el oriente de la calle General Blanche, nació en Madrid el 11 de marzo de 1914. Pertenecía a la Prelatura del Opus Dei, creada por el también español José María Escrivá de Balaguer. Era ingeniero de caminos además doctor en Filosofía y en Derecho Canónico. En 1990 fue designado obispo por el Papa Juan Pablo II, quien le confirió la ordenación episcopal. Hizo una excelente labor dentro de la Prelatura, continuando con el estilo impuesto por Escrivá de Balaguer, falleciendo en Roma el 23 de marzo de 1994. Está abierta su causa de beatificación y canonización, la que suponemos se concretará próximamente. La edificación de la Universidad de los Andes del Opus Dei y su diseño arquitectónico son francamente espectaculares y su nivel de enseñanza es óptimo. Allí todo es muy ordenado, sus salas de clase se caracterizan por su pulcritud. Sus espacios libres, jardines, piletas, especies vegetales y todo lo ornamental son mantenidos con especial preocupación por especialistas renombrados y sus alumnos llegan a estudiar allí en automóviles por razones de fácil comprensión. El Transantiago sabiamente optó por no extenderse hasta esa instalación religiosa. En todo caso, sería deseable que las autoridades de Las Condes digan francamente que los cambios urbanísticos se aprueban para facilitar el crecimiento de esa universidad tan bien relacionada con ellas.